Ayer la noticia sobre la trágica muerte del popular WILLIAM ENRIQUE VICENT VIELMA generó emociones encontradas y principalmente mucha tristeza entre quienes lo conocieron y apreciaron.
El venidero 6 de diciembre cumpliría 32 años al frente del kiosco Guanaguanare, ubicado en la calle Maneiro con Mariño, donde a diario acudían lectores de todos los rincones de la geografía insular por su carismática y servicial atención para con todos.
William nació hace 51 años en Maracaibo, pero asumió a Margarita como su tierra, tanto así que fue acogido como hijo adoptivo de Porlamar hace varios años.
Por razones desconocidas, WILLIAM tomó la trágica decisión de lanzarse desde la azotea de un edificio, de 3 pisos, de donde se impulsó con una silla.
La caída le causó la muerte instantánea tras sufrir traumatismo craneoencefálico severo y politraumatismo generalizado.
La policía científica aperturó investigación al respecto, aunque algunos aseguran las presiones económicas incidieron en este trágico desenlace.
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